Al igual que los hombres desean sobre todo poseer un gran pecho y unos buenos bíceps, las mujeres desean tener unos abdominales y unos glúteos firmes.
Es cierto que según va avanzando la edad de las mujeres, éstas se enfrentan a diversos problemas como la celulitis, flacidez muscular generalizada y acopio de grasa sobre todo en la zona del abdomen y glúteos. Bien, esto es así porque, en esas zonas disponen de más adipocitos o células grasas que hacen acumular más grasa en esas zonas que en otras zonas del cuerpo.
Digamos que esta es la mala noticia, pero ahora os contaré la buena. Con el entrenamiento regular y la alimentación correcta podemos mejorar nuestra estética corporal y lucir un abdomen prieto y unos glúteos firmes. Los resultados finales dependerán del grado de esfuerzo que empleéis en vuestra actividad física, de vuestros hábitos alimenticios y del nivel inicial del que partimos.
No son pocas las mujeres que nos requieren para tonificar esas zonas, desesperadas porque no consiguen librarse de esa capa de grasa que cubre esas zonas. Su consigna es clara: “quiero abdomen y glúteos firmes”. La respuesta es sencilla: “hábitos alimenticios saludables, ejercicio regular y constancia, igual a resultados garantizados”.
Saber cuantas calorías necesita nuestro cuerpo para el desarrollo de nuestras actividades cotidianas es nuestro punto de partida. En lugar de hablar de “dieta”, nos gusta hablar de hábitos alimenticios saludables pues la gente asocia “dieta” con pasar hambre y esto no tiene porque ser así. Una vez determinadas nuestras necesidades calóricas pasaremos a la elaboración de las comidas, que deben de ser variadas y sin déficit de ningún nutriente. A estas comidas añadiremos alimentos específicos para que nos ayuden a combatir la grasa de manera saludable. De esta manera si queremos combatir por ejemplo la celulitis o piel de naranja, tomaremos alimentos como carnes magras, pescados a la plancha, cítricos con bajo contenido en azucares como la naranja, el limón o el pomelo, verduras, pepinos… además de beber mucho agua. Además añadiremos ciertas especias que potenciaran la lucha contra la retención de líquidos como el ajo y el perejil entre otros.
La segunda parte de la estrategia es el entrenamiento o actividad física adecuada a cada persona, pues no es lo mismo una chica de 20 años con obesidad, que una de 40 años con celulitis. Dejemos claro que obesidad y celulitis no es lo mismo. La obesidad es una “afección” debida a una ingesta calórica superior a la que el cuerpo necesita, mientras que la celulitis es una inflamación del tejido subcutáneo, que presenta un aspecto similar a la piel de una naranja. La celulitis suele presentarse en caderas, nalgas, muslos, brazos, abdomen y puede presentarse incluso en mujeres delgadas. La obesidad y la celulitis pueden presentarse juntas o por separado.
Así pues, podemos afirmar que con unos hábitos alimenticios saludables y el programa de entrenamiento adecuado para cada persona, conseguiremos los resultados deseados.
Tanto si eres una mujer que quieres recuperar la silueta tras el parto, tienes sobrepeso, retención de líquidos, celulitis o si solo quieres tonificar esas zonas, no lo dudes más y ponte en contacto con nosotros. Juntos lo conseguiremos.